Entrevista Maite Fibla. Cofundadora de Ship2B Foundation y Cofundadora/Managing Partner de Ship2B Ventures

Entrevista Maite Fibla – Cofundadora de Ship2B Foundation y Cofundadora-Managing Partner de Ship2B Ventures

Maite Fibla: “Las startups de nuestra cartera han incrementado sus ingresos un 192% y han creado más de 229 empleos en el último año. Esto evidencia que cambiar el mundo y generar riqueza económica no solo es posible, sino que es una combinación ganadora cuando el modelo de negocio está bien diseñado”.

Maite es doctora en economía y cofundadora y Managing Partner de Ship2B Ventures, una firma de Venture Capital de Impacto nacida a finales de 2020 que gestiona más de 60M€. También es cofundadora de Ship2B Foundation nacida en 2013, una entidad sin animo de lucro que acelera y acompaña startups de impacto, impulsa programas de Venture Philanthropy y programas de corporate impact venturing en grandes compañías. Hasta la fecha Maite ha invertido en más de 50 startups de impacto y ha realizado 3 exits. También ha ayudado a acelerar a más de 200 startups que han levantado más de 100M€.

¿Cómo definiría los principales objetivos de Ship2B Ventures en cuanto a impulsar el impacto social y medioambiental a través de la inversión?

Ship2B Ventures nace con un propósito claro: impulsar soluciones que resuelvan los problemas sociales y medioambientales más acuciantes de nuestra sociedad y que cuenten con modelos de negocio sostenibles. Por tanto, nuestro objetivo es doble: por una parte, resolver problemas sociales y/o medioambientales, y por otro, generar riqueza económica para los inversores, emprendedores y la sociedad en general.

Para ello, invertimos en startups que desarrollan soluciones de impacto que generen impactos profundos, escalables y realmente transformadores, siempre con modelos de negocio rentables. Actualmente hemos invertido en más de 51 startups de alto impacto que abordan principalmente dos grandes retos: la mejora de la calidad de vida de colectivos vulnerables, como personas mayores y aquellas con condiciones crónicas, y la lucha contra el cambio climático. Con nuestra cartera actual, aspiramos a mejorar la vida de más de 200.000 personas en los próximos tres años y contribuir a la reducción de más de 1 millón de toneladas de CO2.

Además, estamos profundamente comprometidos con la igualdad de género. Aunque no tenemos una política de cuotas, en nuestro último fondo, el 60% de nuestras startups están fundadas o cofundadas por mujeres, un dato extraordinario en el sector. Y el 52% del personal de estas empresas tecnológicas son mujeres, con una brecha salarial prácticamente inexistente.

¿Cómo maneja Ship2B el balance entre la rentabilidad financiera y el impacto social en sus decisiones de inversión? ¿Es posible conseguir que el impacto social/medio ambiental no penalice la rentabilidad financiera?

Nuestro modelo busca equilibrar el trinomio impacto-rentabilidad-riesgo. Esto implica integrar este análisis desde el inicio del proceso de inversión y contar con un equipo que comprenda en profundidad cómo maximizar estos tres factores simultáneamente. Lograr este balance requiere tiempo y aprendizaje, especialmente si el objetivo es generar impactos profundos y reales, no superficiales. La clave está en alinear la solución que ofrece la startup con el problema social o medioambiental que se quiere resolver. Cuando esta alineación es sólida, el impacto refuerza la rentabilidad económica y se minimiza el riesgo de trade-offs entre ambos.

Nuestros resultados lo demuestran: las startups de nuestra cartera han incrementado sus ingresos un 192% y han creado más de 229 empleos en el último año. Además, por cada euro que hemos invertido, han movilizado 1,5 euros adicionales de capital convencional. Esto evidencia que cambiar el mundo y generar riqueza económica no solo es posible, sino que es una combinación ganadora cuando el modelo de negocio está bien diseñado.

¿Qué tendencias emergentes ve en la inversión de impacto en Europa y cómo espera que evolucione este sector en los próximos cinco años?

La inversión de impacto ha crecido exponencialmente, pasando de poco más de 100 billones de dólares en 2017 a 1,5 trillón de dólares en 2024. Este crecimiento ha ido acompañado también de un crecimiento en el volumen de inversión con criterios ESG (Environmental, Social, and Governance), lo que refleja el interés global en inversiones más responsables. Sin embargo, un estudio de ESADE advierte que, aún y el aumento en el volumen de inversión de impacto y de inversión con criterios ESG, estamos en camino de alcanzar solo el 15% de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la UE para 2030. Esto se debe a que muchas de las inversiones que se están realizando actualmente con criterios responsables o de impacto van destinadas a soluciones que no abordan la raíz de los problemas sociales y medioambientales, quedándose en impactos superficiales.

El futuro de la inversión de impacto debe avanzar hacia enfoques más transformadores y sistémicos si realmente queremos erradicar los problemas sociales y medioambientales a los que nos enfrentamos como sociedad. No basta con movilizar capital hacia proyectos con impacto; es fundamental asegurar que cada inversión tenga una adicionalidad real, generando cambios profundos y sostenibles. La inversión de impacto debe diferenciarse claramente de la inversión con criterios ESG, que a menudo se limitan a financiar soluciones superficiales sin lograr atacar la raíz de los problemas y generar cambios sistémicos. En Europa, estamos viendo ya un mayor enfoque en la inversión de impacto sistémica, que busca cambios estructurales, y en la movilización de recursos hacia áreas críticas como la salud, el cambio climático y la inclusión social. Por ejemplo, si hablamos de inversión de impacto en el sector salud y social. ¿Qué cambio sistémico necesita el sistema de salud y social Europeo? ¿Qué startups sociales o del sector salud nos ayudan a avanzar hacia el cambio sistémico que necesitamos? ¿Cómo el inversor de impacto puede contribuir a través de sus inversiones a generar el cambio que necesitamos?

Estás cuestiones son las que van a marcar la agenda de los inversores de impacto Europeos que invertimos en el sector salud y social en los próximos años. De hecho, son las cuestiones que están marcando ahora mismo la tesis de inversión del nuevo fondo de impacto que estamos lanzando desde Ship2B Ventures y que esperamos cerrar a mediados de 2025.

Muchas de las start-ups invertidas por Ship2B Ventures tienen Desarrollos digitales orientados a la mejor gestión de las personas mayores y a pacientes con enfermedades crónicas. ¿Cómo ve la irrupción de la IA en este campo y en concreto el reto de la gestión de los datos de esos pacientes?

Más del 50% de nuestras inversiones están enfocadas en mejorar la calidad de vida de personas mayores y pacientes con enfermedades crónicas. Tenemos una visión holística, invirtiendo en soluciones que abarcan desde la prevención y el diagnóstico precoz hasta el tratamiento, la monitorización y la inclusión social. La inteligencia artificial (IA) y el machine learning representan una oportunidad revolucionaria en este ámbito. Estas tecnologías permiten personalizar diagnósticos, optimizar tratamientos y mejorar el seguimiento de pacientes y usuarios, escalando el impacto de las soluciones y reduciendo costes para los sistemas sanitarios. Algunos ejemplos en nuestra cartera son Sycai, MJN, Doctomatic o Envita. No obstante, la gestión de datos de pacientes es un desafío clave. La privacidad, la interoperabilidad y la ética deben ser prioridades. Es crucial garantizar que los datos se utilicen de forma segura, transparente y con el consentimiento informado de los pacientes. Además, la calidad de los datos y su análisis determinarán el éxito de estas soluciones.

Sus Inversiones están enfocades entre otros aspectos a la sostenibilidad ambiental y al cambio climático y también a la calidad de vida y de salud. ¿Considera que los dos aspectos se encuentran cada vez más interrelacionados? ¿Han observado un aumento de start-ups que consideren desarrollos donde la interconexión de ambos aspectos a través del real Word data tenga un mayor peso?

Por supuesto, estos dos aspectos están cada vez más entrelazados. No podemos hablar de calidad de vida sin considerar el impacto del cambio climático, que afecta gravemente la salud y el bienestar, especialmente en colectivos vulnerables como personas mayores o con enfermedades crónicas. En los últimos años, hemos visto un aumento en startups que trabajan en esta intersección, utilizando datos del mundo real (real-world data) para diseñar soluciones innovadoras. Por ejemplo, algunas empresas están desarrollando herramientas que combinan análisis del impacto ambiental con modelos predictivos de salud, permitiendo intervenciones más efectivas. Esta convergencia es clave para abordar problemas complejos. Por ejemplo, soluciones que combinen datos climáticos y de salud pueden prevenir enfermedades respiratorias agravadas por la contaminación o diseñar infraestructuras más resilientes ante fenómenos extremos que afectan la salud pública.